jueves, 10 de febrero de 2011

Deseo

Despacio pero firme
Se deslizan las sensaciones
Poco a poco el deseo se sirve
Y se abren paso las emociones

Puedes sentir cada poro
Tus sentidos te enloquecen
Tus labios se humedecen de a poco
Con los latidos que te estremecen

Se expande la fuerza y el instinto
La mente no tiene lucidez
Cada instante es más primitivo
Y no hay espacio para la timidez

El pecho clama un desahogo
Hay muchas cosas que expulsar
Un grito que expresa un logro
Y una sonrisa difícil de endulzar

Todo se contrae sin control
El aire se contamina de algo
Tan sublime que parece dolor
E imposible de verse falso

miércoles, 4 de marzo de 2009

jueves, 19 de febrero de 2009

2.000 Km

A dos mil kilómetros de tus ojos
te puedo ver sonreir
a dos mil kilómetros de tus manos
no se qué más decir

Miedo, de cada mirada
miedo, de verte
miedo, de ser acariciada
miedo, de tenerte

No hay dueño que tenga la llave
secretos, sólo secretos
no hay dueño que vea hacia adentro
sueños, sólo sueños

Miedo, de verte correr
miedo, de verte
miedo, de verte desaparecer
miedo, de tenerte

El viento me grita tu nombre
con eco, con eco
el silencio hace que no te toque
beso, sólo un beso

A dos mil kilómetros de todo
lo nuevo parece distinto
nos amenazamos con quedarnos solos
y cada vez estamos más lejos del destino

Cada acción va rasgando las venas
viendo caer cada gota en el vacío
escudriñando hasta la más mínima pena
apuñalándose hasta el hastío

Victimas de nosotros mismos
castigados por la capacidad de pensar
pensamientos que se estremecen como sismos
acciones que nadie debe interpretar

Dónde está el amor propio
¿por qué hay que ser de los demás?
¿por qué hay que vivir en un podio?
¿por qué no se puede ver más?

Tal vez hay que amar los procesos
la belleza sin pensarla
hay que ver por la ventana como presos
pero esta libertad sí puedes tocarla

martes, 10 de febrero de 2009

Control

Qué difícil es tenerte y qué impredecible es perderte. ¿Cómo definir el significado que tienes? le das orden al caos, le das tranquilidad a las ansias y le das aburrimiento a la improvisación. Cómo vivir contigo sin odiarte y como estar feliz si no estás cerca.

Sin ti, el andar es un eterno terremoto, nunca se sabe qué edificio va a caer, ni qué parque se va a destruir. Contigo todo es tan aburrido, que la perfección se aleja de su significado.

Sin ti están los creativos y proactivos, contigo están los organizados y metódicos. Contigo se está cuando se está feliz, pero es una felicidad efímera. Sin ti se está cuando se está en movimiento, ¡pero qué terrible es no tener estabilidad!

Te aman, pero te odian. Te necesitan pero no te quieren. Estás, pero a veces no te sientes.

Restringes lo que más se ama... la libertad. Pero, ¿cómo se conoce el exceso si estás presente? ¿Cómo se tiene paz si no estás?

Gris, un control descontrolado o un descontrolado control; gris claro o gris oscuro, no se sabe.

Sólo se sabe que estás, que existes, que de vez en cuando te llevan en un carro y a veces abres la puerta intespestivamente y saltas. Sólo te piden que avises tu parada, para poder preparase para tu despedida.

jueves, 5 de febrero de 2009

Pensamientos


Vuelan sin límites
sin destino, sin lugar
no los tocaste, no los viste
se fueron sin avisar

Todo es posible aquí o allá
pintan del color que quieran
siempre que quieran persistirán
sin percepción aunque los sintieran

Hacen, deshacen y rehacen
inventan, corren y desaparecen
los olvidaste y reaparecen
los reniegas y ensordecen

No importa cuanto ruido haya
hasta los sordos lo oyen
no importa que tan lejos vayas
siempre habrá quien los nombre

Compañeros de la soledad
abrazos del silencio
luz en la oscuridad
siempre pensamientos

martes, 3 de febrero de 2009

Chile


Allí está, una montaña de deslumbrante pico nevado, que desde esta gran laguna luce como una gran irreverencia al fresco clima. Está allí, tan lejos que la insolente neblina a veces aparece para recordármelo; pero la puedo ver y eso la coloca más cerca que antes.

Mientras veo mi paz reflejada en el lago, trato de pensar en el inmenso mar que me separa de mi hogar, pero esa imponente montaña da luz a mi mirada, mientras dibuja una sonrisa imperceptible a los demás. Volteo y no hay alguien, me siento acompañada pero mis ojos no pueden ver más que hielo, roca, tierra y agua.

Con la cara sucia del trayecto y las mejillas sonrosadas por el sol, arrugo los ojos ante el resplandor mal tapado por mi gorra. Un eco en el horizonte me recuerda que quedé rezagada del grupo, pero algo en el ambiente me prohíbe preocuparme, aunque se que no puedo sobrevivir sola a esta noche. El eco se repite dejando que mi nombre golpee las paredes de las montañas. Sí, deseaba que ocurriera, pero ahora no quiero ser molestada.

Él lo sabe y se sienta tímidamente a mi lado con el silencio de la sabiduría que lo caracteriza. Lo veo, le sonrío y me responde con esa cálida mirada que podría derretir la nieve. Él ve la montaña conmigo y al ver el horizonte, veo el reloj que me recuerda que el tiempo existe y que ni la más sublime sensación lo puede detener. Nos vemos buscando aprobación y con un acuerdo de 20 mil palabras no dichas, nos paramos a buscar donde acampar.

Mientras sonríe dice "deja vu", yo río tratando de ocultar la vergüenza de hacerlo devolver con el peso de la carpa en su espalda, solo para rescatarme del hipnotismo de la montaña.

Él sabe que después de haber visto esto me puedo morir, él sabe que es lo mejor que me pudo dar y en este momento, en este trayecto donde me acerco más a la montaña mientras accidentalmente siento el placer del roce de su mano, me pregunto a dónde voy.

No quiero regresar, pero tampoco puedo ir a la montaña. Él me abraza como si leyera mis pensamientos y me anima a caminar sin ellos, solo con ilusión, gratitud y amor.

Él se detiene, me abraza fuerte otra vez, toma mi rostro con unas manos de temperamento fuerte y me envenena con su mirada dejándome caer desvanecida en sus labios. Me podría morir ahora sintiendo que la vida me dio todo lo que me pudo dar.

domingo, 1 de febrero de 2009